128 Años de Amor y Entrega: Aniversario de las Franciscanas de Nuestra Señora del Buen Consejo
El 14 de febrero de 1896, Dios sembró en el corazón de la Madre Teresa Rodón Asencio un sueño que hoy sigue floreciendo: la Congregación de las Franciscanas de Nuestra Señora del Buen Consejo. En Astorga, con una confianza absoluta en la Providencia y el deseo ardiente de vivir el Evangelio, nació esta familia religiosa que, desde hace 128 años, camina de la mano de María, guiada por el espíritu de San Francisco de Asís.
El carisma franciscano y mariano es el alma de esta Congregación. El espíritu de sencillez, pobreza y fraternidad se entrelaza con la ternura y obediencia de María, quien nos enseña a decir “Hágase en mí según tu palabra”, confiando siempre en los planes del Señor. La Madre Teresa, con amor filial, la llamaba “mi divina Madre, mi divina Maestra”, porque en sus brazos aprendió a escuchar, a confiar y a entregarse con generosidad.
Hoy, al celebrar estos 128 años de historia, damos gracias a las hermanas que nos acompañan en el colegio todos los días Sor Josefa, cuyo centenario de entrega se cumple este 19 de marzo, Sor Obdulia, Sor Isabel González, Sor Isabel Perdomo, Sor Marcelina, Sor Florencia, Sor Aquilina, Sor Guadalupe y Sor Elena, quienes con su generosa dedicación nos acercan todos los días el mensaje del Evangelio. Ellas nos ayudan a mirar al pasado con gratitud, al presente con esperanza y al futuro con confianza. No nos olvidamos de aquellas hermanas que también han formado parte de nuestras vidas: Sor Nieves, Sor Clorinda, Sor Gloria, Sor Cecilia, os recordaremos siembre con gratitud y amor.
A lo largo de los años, las hermanas han sido testigos del amor de Dios en su misión: formar inteligencias y corazones para el Cielo. Desde colegios y escuelas hasta el servicio a los más necesitados en asilos y misiones, cada obra es un reflejo del Evangelio vivido con alegría y entrega.
Que María, Nuestra Señora del Buen Consejo, siga guiando los pasos de esta Congregación, y que el Espíritu Santo renueve en cada hermana el fuego del primer amor, para seguir siendo luz en el mundo.
¡Feliz aniversario, Franciscanas de Nuestra Señora del Buen Consejo! Que el Señor siga haciendo maravillas en vosotras y a través de vosotras.
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